Con el objetivo de cuidar el ambiente, el Municipio y el Colegio de Farmacéuticos de San Isidro firmaron un convenio para poner en marcha un programa de desecho de medicamentos vencidos, por el que los vecinos podrán acercar a las farmacias del distrito fármacos después de su fecha de vencimiento.
Tras la firma del acuerdo, el intendente Gustavo Posse expresó: “Trabajamos junto al Colegio de Farmacéuticos en esta muy buena iniciativa para que los vecinos elijan la farmacia que quieran y lleven los medicamentos vencidos. Es una forma de evitar que los tiren a la basura y terminen en el Ceamse”.
El presidente del Colegio de Farmacéuticos, Gustavo Garcilazo, explicó que una vez vencido, el medicamento se considera residuo patológico.
“El programa busca concientizar a la población sobre los problemas que puede ocasionar en el medio ambiente un medicamento vencido. Además, es necesario informar sobre los trastornos de salud que se pueden presentar como consecuencia del consumo de un medicamento vencido, ya que no sólo es la falta de acción terapéutica, sino que hay muchos principios activos que se transforman en tóxicos”, explicó Garcilazo.
Y agregó: “La idea es que la gente acerque ese medicamento a la farmacia y nosotros lo derivaremos al circuito correspondiente para que no contamine el ambiente ni sea tóxico en el caso de que alguien lo tome”.
“Buscamos generar mejores condiciones de vida con más información y más salud”, remató Posse.
Tras la firma del acuerdo, el intendente Gustavo Posse expresó: “Trabajamos junto al Colegio de Farmacéuticos en esta muy buena iniciativa para que los vecinos elijan la farmacia que quieran y lleven los medicamentos vencidos. Es una forma de evitar que los tiren a la basura y terminen en el Ceamse”.
El presidente del Colegio de Farmacéuticos, Gustavo Garcilazo, explicó que una vez vencido, el medicamento se considera residuo patológico.
“El programa busca concientizar a la población sobre los problemas que puede ocasionar en el medio ambiente un medicamento vencido. Además, es necesario informar sobre los trastornos de salud que se pueden presentar como consecuencia del consumo de un medicamento vencido, ya que no sólo es la falta de acción terapéutica, sino que hay muchos principios activos que se transforman en tóxicos”, explicó Garcilazo.
Y agregó: “La idea es que la gente acerque ese medicamento a la farmacia y nosotros lo derivaremos al circuito correspondiente para que no contamine el ambiente ni sea tóxico en el caso de que alguien lo tome”.
“Buscamos generar mejores condiciones de vida con más información y más salud”, remató Posse.
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